4th of July en Big Sur... Y donde es eso?


El 4 de Julio en USA es época de fuegos artificiales, banderitas americanas por todos lados, hot dogs y hamburguesas. Al menos eso es lo que cuentan, porque nuestro Independence Day de 2019 en los USA lo pasamos manejando por la costa Californiana, maravillándonos con increíbles vistas del mar y del campo. No tanto como las que nos esperaban el 5 y sobre todo el 6 de Julio, pero ciertamente magníficas.

Ese fin de semana largo la pasamos de lujo, aprovechando que el 4 caía en jueves, y que yo tenía vuelo pagado por mi trabajo para ir a un evento la siguiente semana en San Francisco. Entonces, nada mas nos organizamos un poco, pedimos unos días de vacas, e hicimos un viaje de casi una semana en el que vimos diferentes parques nacionales con bosques, playa y ciudad. Solo nos faltó encontrar algunos osos en el bosque, aunque los busqué por horas a la mitad del Sequoia National Park.

El viaje lo empezamos en Big Sur. Bueno, técnicamente lo empezamos en el aeropuerto de San Francisco, donde aterrizamos a la 1am de un jueves por el vuelo guajolotero que tomamos desde DC, donde medio dormimos esa madrugada, y donde rentamos una camionetita Subaru que nos llevó para todos lados sin problema, excepto por el hecho que la gas estaba 25% más cara que en nuestra casa al otro lado del país.
Con camioneta lista, nos fuimos directo y sin escalas a pasar el día en Big Sur. ¿Dónde? Big Sur. Es uno de esos lugares que seguro han visto en películas o anuncios donde va un convertible paseando por las curvas californianas con vistas increíbles de los riscos y del mar, pero que no saben como se llama. Pasamos por Monterey Bay, de la cual cantó Frank Sinatra y a la que diferentes películas y canciones hacen referencia por su gran belleza, por la bio-diversidad marina que alberga y sobre todo, de donde es originario el queso Monterey Jack con el que Cinthya se prepara quesadillas todas las noches. Ya saben que no puede vivir sin ellas. Obviamente comimos un poco de queso producido localmente, aunque no compramos ninguno para nuestra casa.

También fuimos a Pfeiffer Beach, que es una playa de arena morada por los minerales de las que está compuesta, y que para llegar tuvimos que manejar por unos caminos de un solo carril que durante la temporada de lluvia y en el invierno pueden convertirse en un infierno, y donde nos preguntamos como le hace la gente local para llegar o salir de su casa. Eran literal subidas super empinadas por donde solo pasaba un carro, pero que en ese momento la transitaban cientos de autos de turistas como nosotros. Tuvimos suerte, porque para llegar ahí fueron un par de horas, y justo después de nosotros cerraron el acceso a los autos porque no había donde estacionarse. Aquí un poco mas de info sobre esta playa.
Finalmente, saliendo de Pfeiffer Beach, después de pasar por el famoso Bixby Creek Bridge, que es otro de esos lugares que han visto pero que seguro no saben como se llama ni donde está, de recorrer la famosa y serpenteante autopista State Route 1, de parar en los miradores para ver cascadas y el contorno de las montañas comidas por el mar, además de pasar horas sin comer, llegamos a Nepenthe, lugar recomendado por el buen Toni. Nepenthe es de esos lugares donde pagas por la vista más que por la comida, que es algo caro, pero que vale la pena. Si buscan cosas que hacer en Big Sur, la visita a ese restaurante es una de las top.

Sin embargo, lo único malo del día es que en Point Lobos, una reserva natural que visitamos para ver focas, leones marinos y demás animales marinos silvestres, tristemente encontramos sólo unos cinco leones y una nutria en lugar de los cientos de animales que debieran estar ahí. Aunque tengan protecciones ambientales los hemos reducido considerablemente por la contaminación, caza y abuso de los recursos naturales de los que todos somos culpables por el estilo de vida que llevamos #meincluyo #thanoswasright.
Con un poco de tristeza y reflexionando un poco sobre nuestro impacto en nuestro planeta, pero agradecidos por todas las oportunidades y la gran vida que tenemos, fuimos a dormir a Fresno, donde pasamos una noche llena de fuegos artificiales, preparándonos para el viaje al Sequoia, King's Canyon y Yosemite National Parks. De los mejores paseos que hemos hecho, y de los cuales les platicaré otro día.

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